DIARIO DE UM POETA REFORMADO

                                                                          29 DE mayo de 2019

Ir a un hospital nunca es grato, a mi me cuesta hasta ir a ver a mis seres queridos, porque suelo salir del lugar muy afectado, con muchas enfermedades que no conocía y que reconozco en mi cuerpo cada vez que atravieso esas inmensas puertas acristaladas que se abre y se cierran como una guillotina.

 Yo soy un poco hipocondriaco, bueno lo de ‘’poco’’ lo pongo entre comillas porque no se las medidas, los parámetros con las que se mide esta enfermedad que arrastro de tiempo, yo lo achaco a que crecí con muchos miedos, y ya lo conté alguna vez mi madre era la criada del medico y por las noches cuando volvía a casa ella después de una extenuada jornada, ella me dormía con historias de enfermedades que ella se inventaba, estoy seguro que lo hacía para que me durmiera pronto pero su intención no surgía efecto en mi sueño, porque  contaba las enfermedades de manera fantasiosa, e impregnaba un miedo en mi infancia, recuerdo que yo siempre le preguntaba por qué la gente se ponen ¡enferma¡ MAMA, ella se quedaba en silencio, y al quedarse desarmada, sin respuesta me decía anda Joselito duérmete ya que mañana madrugamos, ella me arropaba y me daba un beso en la frente, pero yo no dormía recordaba esas malévolas enfermedades que atormentaba a la gente de mi pueblo.

 Yo crecí con miedos y nunca hice terapia con ningún especialista, tener una infancia precaria es malo pero tener una infancia de miedos es terrible, lo llevas para toda la vida en tu cabeza, hoy veo a niños que juegan a la guerra con armas estrambóticas y me alarmo, terrible que los padres le compre esos cacharros, veo niños con juegos virtuales que matan monstruos, y me da miedo, por que matar siempre me dio pánico jugar a matar y morir es terrible.

Ayer fui al hospital a consultas externas, para que me miren lo que tengo que así describía mi madre  sus visitas al especialista, en realidad iba a una prueba que hace unos años ni soñábamos  íbamos a tener nos parecía de ciencia ficción, que nos metieran en una cápsula parecidas a las que veíamos en la tele, cuando el hombre llego a la luna, que recuerdo mi abuelo que era un ilustrado de las posguerra por que savia´´ leer y escribir`` él siempre decía eso es mentira es propaganda  yanqui, mi abuelo era comunista,  hizo la guerra con la república, y odio de por vida la propaganda capitalista de Estados Unidos.

Hoy llegue a un lugar parecido a la NASA, desde donde mandaban esa capsulas que iban a la luna, no esto no es CABO CAÑAVERAL, por cierto, siempre me encanto ese nombre Cabo cañaveral, cuanta musicalidad en esas palabras ‘por dios` me encantan pronunciar esos nombres tan musicales, palabras con música.

Hoy estuve en la NUEBA FE, que así se llama este hospital mastodóntico construido, en la era de los grandes eventos en esta ciudad. Entonces todo era lo más grande del mundo. La copa AMERICA la FORMULA 1, el puente de las FLORES, el gran AGORA que esta cerrada y sin acabar, la inmensa CIUDAD DE LAS ARTES, todo mastodonte de hormigón, que según los gobernantes de entonces que pusieron a VALENCIA en el mundo, sin saber que VALENCIA ya existía en la época romana.

Ahora dentro de esta capsula donde me están haciendo una prueba, pienso en esa fiesta del despilfarro y la corrupción donde nos llevaron determinada clase política, y después de ver el resultado de las últimas elecciones, donde nadie castiga la corrupción pienso no hemos aprendido nada.

 Con esos grandes eventos se forraron los políticos de turno incluso con la visita de un PAPA no tenían rubor llegaron a la política para ganar dinero eso decía uno que fue presidente.