martes, 4 de abril de 2017

DIARIO DE UN CUIDADOR INEXPERTO
Mi madre hoy me dice que tiene un ''tabardillo'' encima que mi padre le calienta mucho la cabeza,que nada le parece bien que no tiene paciencia, un montón de razones que le hacen que este en un perenne ''tabardillo'' según ella, segun mi padre mi madre esta muy caprichosa últimamente, y nada le parece bien y entre los dos el Ángel Boliviano, que la cuida entre semana.
Los ángeles ´´laicos `` y los otros si los hay son imprescindibles,nos hacen falta sin ellas, y digo ellas por que siempre son ''ángelas'' las que cuidan de nuestros mayores,ella que apenas es una adolescente entre dos niños de mas de 80 años,''por que son niñ@s``.
Ella mediando y poniendo cordura a una parejita de ancianos que en sus años mozos discutían com discuten las parejas que se quieren,pero ahora es una guerra diaria si mi madre dice blanco mi padre dice negro, ami me faltan las fuerzas y eso que solo los oigo por el auricular del teléfono.
Cuando eran jóvenes mi madre pasaba la vida cosiendo, en el mercado , o en esa reuniones de vecinas sentadas en las sillas de nea cada una con una costura, que tiempos, entonces se veían tan poco las parejas que no tenían tiempo de discutir, mi padre todo el día en el campo, cuando llegaba de dar el jornal se chapoteaba en el barreño del corral con agua fría del pozo,se arreglaba y ha echar la ''ligailla'' a la taberna donde solo estaban los hombres, volvía para cenar que mi madre siempre le tenia,el plato en la mesados huevos pasados por''agua'' con aceite de oliva mi padre siempre fue monote-matico en el menú,cuando dejaba el plato'' brillante''siempre acababa la cena con la misma frase,ya no quiero mas que si ceno mucho luego no duermo,y a dormir esa era la escasa relación de dos ''carnes de yugo`` nacidos para trabajar.
Ahora tienen todo el tiempo del mundo para decirse lo que no se dijeron cuando eran jóvenes,cuando la vida les negaba el espacio para quererse,y ahora cada vez que se hablan es para hacerse un reproche, son como dos niños aburridos,que no paran de refunfuñar,la vida es así pasa entre los dedos ,como agua fría del pozo,miran las fotografías, y es el instante de felicidad que les quedan, esos rostros son de ellos, y ya ni ellos se reconocen,se miran y ya no se acuerdan que son ellos casi dos desconocidos, dos vidas derrotadas, el tiempo se les fue creo que nunca fue suyo.
Yo los oigo en el auricular a lo lejos de la sala sus voces,y me faltan las fuerzas, la soledad los esta alejando a uno del otro y cada vez son mas niños y mas caprichosos, quizás les sobre el tiempo y les falte el amor, yo seguro que seré un niño caprichoso cuando cumpla los 80 si los cumplo.por que ahí días que son años,las canas y las ojeras me lo indican, días eternos,salvados por un ángel Boliviano, con mas paciencia que yo.

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