miércoles, 11 de septiembre de 2019


DIARIO DE UN POETA APOSENTAO,
Dormir mi utopía, mi revolución.

Hoy me despertó la lluvia, hace días que este poeta, no duerme, duermo mal dice mi médium que he tenido una vida muy ‘’intensa’’ y que estoy en una época de bajada que no me preocupe que el sueño se regula solo, y hay estoy con mi insomnio ,que durante el verano me acompaño, fue hasta complicado echar la siesta así que huérfano de sueño, y con muy mal humor, bastante negativo, he ido arrastrándome estos últimos meses, ni con medicamentos ni con lecturas pesadas, ni de noche ni de día menuda tortura.
Pero hoy 11 de septiembre conseguí dormí. no se si fue un milagro, quizás mis dioses Telúricos me escucharon, y dormí hasta que esta lluvia matinal repicaba en mis cristales, escuchaba la banda sonora de la mañana y me sentía en ese paraíso Telúrico, después de escuchar la música que mas amo el repicar del agua en los cristales me levante para ver el espectáculo sonoro que surgía de las melenas de las palmeras.
Amo la lluvia lo confieso, es hermoso ver caer este misterio de un cielo tan maltratado, hoy por fin llueve mansamente, y los niños pisan los charcos y estrenan sus botas de agua, y salpican se ríen, y pisan un gran charco uno de los ‘’buenos’’ juegan con la naturaleza, la lluvia es mi gran metáfora la mas viva.
 Como recuerdo mi infancia esos días de lluvia, que mi padre no iba al al campo  que las gallinas no salían al corral y que el gallo dormía su canto en la cuadra, no íbamos a la escuela, mi aula estaba en aquel cortijo olvidado del Sur, mi padre encantado la lluvia es el mejor regalo para un agricultor, no lo dudéis el hombre que trabaja la tierra es siempre un ‘’llorón’’ en el buen sentido de la palabra, pero cuando llueve cambia su mundo.
El agua en el barbecho, la lluvia derramándose por la melena recién recortada del olivo de mi tierra, la sequia es lo mas terrible que tiene el planeta decía el poeta ‘’no llueve y son los montes calaveras’’ y la supervivencia se agranda con el agua ‘’azul’’.
La lluvia agranda mi corazón y me lleva siempre a mi poeta preferido Miguel Hernández, a sus versos amorosos, y también al dolor, ‘’lluviosas soledades’’ al dolor de la muerte de un amigo, y gran poeta FEDERICO GARCIA LORCA. Y una vez más al callejón del llanto, lluviosamente entro.
La lluvia como símbolo, como metáfora en todos los territorios de la vida, en la tierra y en el corazón del ser humano, el agua que riega el alma cristalina, ‘’Llueve. Los ojos se ahondan buscando tus ojos, esos dos ojos que se alejaron a la sombra, cuenca adentro.’’
Llueve ahora que escribo este diario y el agua vibra en mis ojos, el agua salpica en un gran charco en el charco de mi infancia y hoy que el agua me despertó, me olvide de mis ‘’goteras’
Las que la vida fue instalando en este cuerpo precario que ahora sale a la lluvia.

11 de septiembre 2019,

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